lunes, 30 de septiembre de 2013

Porche

Donde yo vivo, en verano, hace mucho calor y no utilizamos el porche casi nada. El porche está construido al final del patio orientado al sur y protegido del viento. Ahora en otoño y sobre todo en primavera es una delicia comer en él o, incluso hacer allí mis tuneos.
Os lo enseñaré.
A la izquierda está la leñera que no enseño mucho porque aún hay mucha madera que sobró de la obra sin cortar y está un poco revuelto.
El mueble que se ve a la izquierda es la barra del bar que había en el bajo de la casa de mi hijo. Según me contó el anterior propietario de la casa, antiguamente fue el mostrador de una botica  ( mi padre la recuerda de cuando era pequeño y ya tiene 88 años). Durante la obra del tejado los albañiles le rompieron el mármol (imaginaos mi disgusto) por lo que le pusimos granito como las mesetas (cualquier día me da un "repente" y le vuelvo a poner mármol). Ahora separa la leñera del comedor.



La barbacoa es lo suficientemente grande como para hacer de una vez comida para diez o doce personas. 


La  meseta es de granito, es grande para poner cómodamente las fuentes con la comida y está tan despejada porque el día anterior habíamos tenido una cena con amigos. Tiene un fregadero y al final un pilón para lavar la ropa que ya estaba en la casa y es de piedra prensada.
Fijaos en las puertas de la meseta, las hicimos nosotros con maderas recicladas de la casa. En las fotos no se nota pero están protegidas y teñidas con anilinas, una en color naranja, otra en verde y otra en amarillo alternándose.


La "espeteira" estaba en la casa y en muy mal estado, la arreglamos como pudimos y colocamos en ella útiles de cocina antiguos que no usamos pero adornan.
Los azulejos del remate eran de una empresa  que hacía e instalaba cocinas y que cerró hace ya muchos años. Acabaron en la basura y yo los recaté, son alemanes y hechos a mano (no hay dos exactamente iguales).


La mesa son, en realidad, dos, unidas y tapadas con un hule por culpa de los gatos ( no son nuestros) que pululan por las huertas vecinas, incluso afilan las uñas en él. Cuando veo porches con sillones y sofás con cojines de tela y en color blanco, me pregunto ¿no habrá gatos ni pájaros que los ensucien?.



Fijaos que preciosidad de mesas, estaban en el bar y las  restauré yo ¡ es una pena tenerlas tapadas pero...... !


Este espejo lo traje de la casa de mi abuela. Era un paragüero que habían cortado, quitado los colgadores y pintado de dorado. Me costó quitarle la pintura y encontrar unos colgadores que taparan los antiguos agujeros pero creo que no quedó mal y tiene su utilidad cuando vienen los amigos a comer o cenar y quieren colgar las chaquetas.


Una vista general del porche. El tejado, vigas y columnas son de castaño.


Al lado del porche hay una construcción que llamamos "la cocinita"  pero eso es otra entrada......






viernes, 27 de septiembre de 2013

Centro de mesa



Con esta entrada quiero participar en el FINDE FRUGAL del blog  COLORÍN COLORADO. Espero que os guste.
Para hacer el centro necesitamos un recipiente de cristal, este, en concreto, lo  compré en los chinos y me costó 5,50 euros.


Unas piedras de las que se utilizan en jardinería (lavadas para quitarle el polvo) . Las elegí blancas porque las flores son de color rojo pero si las flores son blancas se pueden poner piedras oscuras. No me costaron nada pues el dueño de la tienda me las regaló.


Se cubren con agua.


Y se colocan una o dos flores sin tallo. Estas son de huerta por lo que 0 euros.


Un centro de mesa que se hace en  un momento, muy barato (en total 5,50 euros) y, menos las flores, reutilizable.

domingo, 22 de septiembre de 2013

Antes y después de una silla encontrada en un contenedor.

Esta silla la encontré en un contenedor. Me avisó mi prima Rosa que sabe  mi gusto por los trastos viejos.
Decidí que la arreglaría para regalársela a mi sobrina (por su cumpleaños) que  junto a Alberto acaban de estrenar  una casa en Orro (A Coruña) y tienen pocos muebles y poco presupuesto.



Mi marido decidió  que me iba a ayudar. Empezó quitando el tapizado, el relleno, las cinchas viejas ....., algunos tornillos para encolar. Total que la deshizo toda . Vi complicado que la volviese a componer pero ¡lo hizo!.
La pinte de blanco roto y comenzamos el trabajo de tapizar.



Las cinchas son nuevas pero los muelles son los antiguos y el relleno es el de crin que ya tenía.


El pretapizado es de un saco de café.



Y el tapizado final.



Hoy se la llevaron y creo que les gustó.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Antes y después de una silla del punto limpio.

La semana pasada descubrí el FINDE FRUGAL del blog COLORÍN COLORADO y pensé "¡qué buena idea! el próximo viernes participaré" y aquí estoy para mostraros un trabajo fácil y barato.
El otro día fui al punto limpio de mi pueblo para llevar unos bidones de pintura estropeada. Como no lo puedo remediar, di una vuelta por el sitio y me traje esta silla de un colegio.


Había llovido por ella.








No quería gastar dinero en arreglarla. Tenía una pintura horrible con la que había pintado el galán de noche (y que luego volví a pintar con otro verde) que pensé que nunca iba a utilizar pero para esta silla no me disgustaba.
 Dos manos de pintura en spray.





Utilicé la primera tela que, también, le había puesto al galán y que luego sustituí por otra retro. La espuma es de un colchón viejo que guardé.
Me llevó dos tardes arreglarla, una para pintarla y otra para es resto. Cuando quise hacer las fotos ya era de noche.



                          La silla vista de día. No quedó mal del tod , es cómoda y no me costó ni un euro.


viernes, 13 de septiembre de 2013

Mi rincón vintage

Quería participar en el concurso de AMOR POR LA DECORACIÓN y estuve pensando qué lugar fotografiar, pues mi casa tiene muchos rincones con sabor vintage. Me decidí  a crearlo en el bajo de la casa de mi hijo y dar un adelanto de su decoración.



Los sillones y casi todos los artículos estaban en la casa cuando la compramos.



El cenicero estaba en el bar (el bajo de la casa de mi hijo era antiguamente un bar).
El teléfono lo compré en una almoneda de Vigo y funciona correctamente.



La plancha estaba también en la casa. Está casi nueva y con caja y todo. La antigua dueña de la casa era una mujer muy "cuidadosa".



La camarera es de los años 70 y la cambió  mi madre por unos puntos de SPAR.
Lo que uso como florero es en realidad parte de un sifón de farmacia.
La cafetera estaba en el comercio de mi tía Mucha que me la regaló cuando lo cerró, la parte de arriba es de cerámica y la parte de abajo es de aluminio.



Las fotos no me han salido muy bien (el próximo cursillo de fotografía que hagan en mi ciudad  prometo hacerlo) pero espero que os guste mi elección.





viernes, 6 de septiembre de 2013

La casa de mi hijo III

Ahora os enseñaré el altillo que se ve desde la sala.
Cuando estábamos arreglando la casa vimos que había mucha altura en el desván, así que pusimos una escalera y lo unimos a la vivienda.
Arriba hay dos camas. Sus cabeceros era una cama (creo que de fresno aunque algunas tablillas son de cerezo) que había en nuestra casa y estaba rota y yo la restauré. El cabecero  más alto y los pies  más bajos pero como el techo va bajando también creo que quedan bien.
Al fondo se ven unas puertas de policarbonato que cierran el desván y se utiliza como zona de almacenaje.




Las maletas las estrenamos mi marido y yo cuando fuimos de luna de miel, ahora guardan los edredones nórdicos.


Nuestro primer ordenador, una reliquia. El sillón vintage.


Esta mesilla la tiró mi prima Sara y la restauré yo. Es toda de castaño.


Y desde arriba se ve toda la sala y el comedor que, como se puede apreciar tiene una abundante luz gracias al gran lucernario del techo.



 ¿Os gusta? 
La casa tiene un bajo que antiguamente fue un bar. Aún no está acabado pero lo enseñaré próximamente.