domingo, 3 de septiembre de 2017

Reciclar mesa y sillas para una cocina

Hola a todas y todos, después de unas muy buenas vacaciones retomo mis entradas en el blog con dos renovaciones.
La cocina en la casa de mis padres llevaba un tiempo sin mesa porque la quitamos para ponerla en otra cocina comedor que hicimos en el antiguo garaje situado en el bajo.
Mi compañero Óscar no quiso una mesa que había en el piso que compró y me la regaló.
Es una mesa de los años 70/80 de imitación acero inoxidable. Digo que era imitación porque las patas estaban bastante picadas por el óxido.








El sobre de la mesa es de cristal ahumado y estaba sujeto a las patas con ventosas que ya no tenía.

El arreglo fue muy sencillo. Limpié de óxido las patas con una pasada de lija y luego las pinté con pintura en spray de acero inoxidable. Era la primera vez que utilizaba esta pintura y quedé gratamente sorprendida, quedó genial.



Siento que la fotografía sea taaaaan mala....






Le puse unas ventosas nuevas y ¡perfecta!






Tenía la idea de que a esta mesa le quedarían bien unas sillas en color negro pero.... más tarde compré en el mercadillo dominguero de mi pueblo estas sillas que me parecieron preciosas.





Tenía claro que las iba a pintar de negro pero con ese respaldo tan alto no quería una tela completamente negra por lo que compré una estampada con pata de gallo.
Las encolamos, las tratamos para la carcoma...



El tapizado nos ha dado (a mi marido y a mí) una latita que no os lo podéis imaginar (si lo sé no las hubiera querido aunque me las regalaran) porque el respaldo no va recto y tuvimos que ponerle como un dobladillo con un cordón dentro para que hiciese fuerza y llevase la tela del respaldo en arco.



Bueno, menos mal que conservamos el viejo tapizado y nos fuimos guiando por él. 







Aunque conservamos el interior de la silla lo cubrimos con un acolchado nuevo.









¿Os gusta el resultado?.