domingo, 10 de febrero de 2019

Antes y después de una mesita de 1 euro

Un domingo, en el mercadillo de mi ciudad encontré esta mesita por la que pagué 1 euro.



Dejé volar mi imaginación y le limpié las partes metálicas, pinté de negro las partes de madera y le puse, con cola blanca o de carpintero, recortes de hojas de libros viejos.
Y este es el resultado. 







Quedará genial en mi cuarto de baño. 
¿Qué os parece?

domingo, 6 de enero de 2019

¿Qué hago con esta lámpara de cristal rota?

Hola, hoy os voy a contar lo que hice con los restos de una lámpara de cristal que me resistía a tirar.
No tengo fotografías del "antes" pero con las de el "después" lo entenderéis.
Limpié bien los trozos, compré una cuerda del tamaño del hueco del interior de los trozos, até nudos al final, y busqué por la casa un lugar donde colgarlos y....




Perdonad por las fotos pero no tenía mi cámara.


Reflejan la luz y quedan muy "chulos". Como siempre digo: "NO SE PUEDE TIRAR NADA".
Besos

lunes, 30 de abril de 2018

Estantería renovada

Hola a todas y a todos, esta estantería que os voy a enseñar lleva en la casa de mis padres unos veintisiete años.
Me la regalaron con una colección de libros infantiles que compré. Es de mala calidad y muuuuuy fea.
Cansada de verla,  me dije "ni un día más..."
No hace falta que os cuente el proceso normal pero lo voy a hacer: lijada superficial, imprimación blanca y, lo que más me costó, elegir el color o colores.





Inspirada en el colgador de la entrada anterior, me decanté por el verde agua.



Con un color quedaba muy "plana" por lo que le añadí un color gris suave con el que pinté el sobre y la moldura de la parte de abajo.
 


 La llevaba viendo veintisiete años y en dos tardes le dí este cambio. NO HAY EXCUSA.
BESOS

viernes, 30 de marzo de 2018

A la tercera va la vencida.

Hola a todas y todos, después de tanto tiempo sin publicar hoy os voy a contar que hay trabajos que no salen a la primera.
En casa de mis padres hay un colgador de resina muy muy feo pero que es perfecto para el hueco entre dos puertas en la entrada de la casa.
Cansada de verlo, un día me decidí a darle un cambio. Tapé con cinta de carrocero el colgador de bronce y le dí una mano de imprimación para luego pintarlo de blanco con un suave decapado...








Pero..., no me gustaba el resultado. Entonces pensé en darle un poco de color... y elegí un verde oscuro con un suave decapado para que se viera el color blanco que había debajo.



Uf!!!, de mal en peor...
Decidí aclarar el verde y, aclarando, aclarando, llegué a este verde agua que no me disgustó.





Mucho mejor ¿verdad?
BESOS

domingo, 3 de septiembre de 2017

Reciclar mesa y sillas para una cocina

Hola a todas y todos, después de unas muy buenas vacaciones retomo mis entradas en el blog con dos renovaciones.
La cocina en la casa de mis padres llevaba un tiempo sin mesa porque la quitamos para ponerla en otra cocina comedor que hicimos en el antiguo garaje situado en el bajo.
Mi compañero Óscar no quiso una mesa que había en el piso que compró y me la regaló.
Es una mesa de los años 70/80 de imitación acero inoxidable. Digo que era imitación porque las patas estaban bastante picadas por el óxido.








El sobre de la mesa es de cristal ahumado y estaba sujeto a las patas con ventosas que ya no tenía.

El arreglo fue muy sencillo. Limpié de óxido las patas con una pasada de lija y luego las pinté con pintura en spray de acero inoxidable. Era la primera vez que utilizaba esta pintura y quedé gratamente sorprendida, quedó genial.



Siento que la fotografía sea taaaaan mala....






Le puse unas ventosas nuevas y ¡perfecta!






Tenía la idea de que a esta mesa le quedarían bien unas sillas en color negro pero.... más tarde compré en el mercadillo dominguero de mi pueblo estas sillas que me parecieron preciosas.





Tenía claro que las iba a pintar de negro pero con ese respaldo tan alto no quería una tela completamente negra por lo que compré una estampada con pata de gallo.
Las encolamos, las tratamos para la carcoma...



El tapizado nos ha dado (a mi marido y a mí) una latita que no os lo podéis imaginar (si lo sé no las hubiera querido aunque me las regalaran) porque el respaldo no va recto y tuvimos que ponerle como un dobladillo con un cordón dentro para que hiciese fuerza y llevase la tela del respaldo en arco.



Bueno, menos mal que conservamos el viejo tapizado y nos fuimos guiando por él. 







Aunque conservamos el interior de la silla lo cubrimos con un acolchado nuevo.









¿Os gusta el resultado?. 

miércoles, 12 de abril de 2017

Hamacas

En el mercadillo dominguero de mi pueblo encontré, a muy buen precio,  dos hamacas. 
Una con la madera en su color natural




y la otra pintada de color azul



Después de una buena limpieza (incluso usé bisturí para sacarle toda la suciedad de los dibujos), una mano de pintura en azul...



y unas telas con el mismo dibujo pero en colores distintos...




y a disfrutar del jardín con el buen tiempo que tenemos esta Semana Santa. 
Espero que os haya gustado esta transformación. Besos.